A mis 38 años de edad nunca había concebido realizarme una cirugía estética por miedo a los quirófanos y cambios drásticos de los cuales me pudiera arrepentir por vanidad. Las bolsitas en mis ojos empezaron a ser notorias y desbalancear el rostro, por lo cual mi preocupación nació. Por casualidades de la vida llegue a manos del Dr. Jorge Mejía, quien me proporcionó la confianza suficiente para realizarme la Blefaroplastia transconjuntival, dándome hoy una nueva expresión a mi mirada. Lo mejor de todo, nadie se enteró de mi cirugía, pero todos han visto el cambio.
Gracias Dr. Mejía.